El Centro Cultural Manos a la Obra celebró como todos los años, el Día del Niño, con una gran concurrencia de chicos y grandes.
La fiesta de agasajo se llevó adelante en la puerta de la institución, en calle Rosario 2575, entre Pje 6 y Pellegrini, donde se cortó el tránsito para seguridad de los más pequeños.
El evento contó con inflables, juegos organizados por un grupo de instructoras de un gimnasio de Rosario, sección de pintura, golosinas, alfajores, premios y sorteos, además de la tradicional chocolatada acompañada de facturas donadas por las panaderías de la zona.
El momento mágico de la tarde tuvo lugar cuando salió a escena el mago "Trapatino", quien desplegó varios trucos, donde los chicos pudieron participar y divertirse junto a sus familias.
Dese la institución expresaron que es un orgullo poder festejar todos los años, el día del niño y la primavera, porque llegan allí niños de distintos sectores de la ciudad. "Es hermoso ver a los chicos divertirse tanto, porque es lo que nos llena; muchos de estos chicos vienen a diario a los diferentes talleres, pero muchos otros vienen porque saben que en esta época celebramos su día", explicó Susana De Bernardo, directora del establecimiento.
A su vez, el presidente de la entidad, Ezequiel Ramírez, afirmó que el trabajo de Manos a la Obra, apunta a mostrar a los chicos algo distinto de lo que suelen ver en la calle. "Trabajamos todos los días para que los niños y adolescentes encuentren nuevas oportunidades, y el día del niño es un gran momento para nosotros porque allí nos mostramos a chicos de otros barrios quienes después pueden participar de los talleres", comentó Ramírez.
Los voluntarios del Centro Cultural, aprovecharon la ocasión para adelantar que el próximo 19 de Septiembre, conjuntamente con la Fundación Educación para la Paz, conmemorarán el Día Internacional de la Paz, y según indicaron, habrá muchas sorpresas.
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